¿POR QUÉ NOS CUESTA TANTO PONER LA MENTE EN BLANCO?

Cuando hablamos de poner la mente en blanco, hablamos de que nuestra cabeza o nuestra mente, no piense en nada en ese momento, es decir, que no la ejercitemos durante un tiempo. Sería similar a un ``empanamiento´´ o en filosofía llamado ensimismamiento.

Las personas tenemos una mente que ningún otro ser ha desarrollado, somos capaces de crear, recapacitar, amar, pensar,… Este hecho no lo hacemos porque queramos, simplemente lo ejercita la mente sin más, es decir, que lo hace por sí misma, por defecto diría yo. La mente nunca puede parar de pensar, por ejemplo, cuando nosotros descansamos, es decir, cuando dormimos, la mente no descansa, si soñamos es porque ella está haciendo que soñemos, pues ¿qué son los sueños, sino pensamientos? Nunca descansa, ese es el tema de la pregunta, poner la mente en blanco significa que la mente descanse, que no piense. Pero, ¿y por qué nos cuesta? ¿por qué no lo podemos hacer con facilidad?

Yo creo que si no podemos poner la mente en blanco, es porque siempre tenemos algo que resolver en nuestra cabeza, somos personas tan complejas que siempre tenemos algo en lo que pensar. De la única manera en la que podemos ponerla en blanco es cuando entramos en el estado de ensimismamiento, pero no lo hacemos cuando queremos, sino que solo podemos hacerlo cuando estamos mucho tiempo solos, aburridos,… Pero normalmente no ocurre, por eso nos cuesta, porque no lo podemos controlar.

Para concluir, mi respuesta a la pregunta, nos cuesta tanto porque siempre tenemos algo en nuestras mentes, siempre tenemos algún problema que resolver, esto pasa porque somos seres muy complejos y siempre queremos mejorar lo que tenemos. Podemos poner la mente en blanco, pero no podemos controlarlo, con lo cual cuando la ponemos no nos cuesta, simplemente pasa porque sí y no tiene explicación. Por mucho que lo intentes no podrás dejarla en blanco, solo intentarás pensar en dejar la mente en blanco, lo cual también se refiere a estar pensando en algo. Asique, podemos ponerla en blanco, pero nos cuesta porque cuando lo hacemos no es por una acción voluntaria.

¿Realmente te tiene que pasar algo para que los que te quieran estén unidos?

Teóricamente la acción de unir es contraer matrimonio, poner de acuerdo voluntades, ánimos u opiniones, juntarse o buscar una persona la compañía de otra,…

Ahora bien, después de esta introducción, ¿sabemos lo que es la unión?, no es difícil saberlo, pero ¿y hacerla? Hacer esa acción a la que me refiero en esta pregunta, es unirse por motivos familiares, amistosos, de compañerismo … ¿Creéis que si todos realizáramos bien esta palabra tan bonita, habría tantas personas con tanta falta de compañía?

La unión no es solo un papel en el que se escriba lo que te une con otra persona, o un objeto por el cual varias personas se han conocido,… es bastante más que eso, cuando estás unido a alguien todas las personas que sean miembros de esa unión deben fortalecer su unión y deben saber lo que les une. Yo con esta pregunta no quiero decir que todas las personas no valoren las uniones que les rodean, pero la mayoría no fortalece al máximo su afinidad hacia los demás, hasta que uno de los miembros de la familia, grupo de amigos, grupo de compañeros,… se pierde, se debilita, o simplemente le pasa alguna alegría. En estos momentos todos acudimos a esta persona, todos la visitan, le dedican su tiempo, le atienden,… En este caso la unión entre estos miembros es mayor, ya que ahora lo que les une está haciendo que ellos fortalezcan su afinidad.

Por todo esto anterior yo me pregunto: ¿realmente hace falta que varias personas se unan por las alegrías o desgracias de los que les rodean? Parece que sí, sin ir muy lejos, cuando una mujer ha dado a luz, todos sus familiares, amigos, compañeros,… la visitan. Otro ejemplo, sería el de un anciano, viudo, puede vivir con sus hijos o puede vivir solo, ese no es el caso, el caso es que este hombre al llegar el final de su vida, hace que todos sus hijos y familiares se unan, vivan donde vivan, lo quieran más o menos, será uno de los pocos momentos en los que verá a toda su ``unión´´ junta.

Yo creo que todo esto lo causa el estrés que hoy en día llevamos, tenemos demasiadas cosas en la cabeza, las cuales no nos hacen ver cómo están los demás, o simplemente el hecho de compartir más tiempo con ellos, posiblemente ellos lo necesiten. Yo pienso que si algún día nos pasara algo, sobretodo una desgracia, todos nos arrepentiríamos de no haber disfrutado al máximo de esa persona o quizás de no haberle dedicado todo el tiempo que se merecía.

¿Porqué siempre existe un ganador y un perdedor?

Mi cuestión de hoy se refiere a algo tan cotidiano como ganar o perder, lo cual no solo se encierra en las definiciones siguientes:
* Ganador: el que gana, siendo ganar una acción por la que se obtiene un beneficio, en la que se vence, en la que se logra algo, etc.
* Perdedor: el que pierde o fracasa en algo, siendo perder una acción por la que se deja de tener ago que se poseía, desperdiciar algo, no lograr lo que se quiere, verse separado de alguien querido o fallecido, resultar vencido...
Mi pregunta va más allá de lo anterior, ¿Porqué cuando alguien gana, a la vez otra persona ha de perder? ¿no podrían ganar las dos?
Parece que no, pero cuando ganamos algo hacemos que otra persona lo pierda. Por esto, ¿no sería mejor que las cosas se quedaran neutras?
Mi opinión es que siempre nos esforzamos al máximo para conseguir lo que queremos, y en tdos los ámbitos de la definición que tiene el verbo ganar, hay que currárselo para ganar algo, pero esto no quiere decir que el que pierda no se lo haya currado lo suficiente, alomejor se lo a currado incluso más que el ganador, pero tiene menos facilidades para hacer o para ejercer esa acción.¿ De verdad creemos que cuando alguien nos arrebata algo sin currárselo y sin embargo, nosotros hemos estado trabajando en ello bastante tiempo, es merecido por el ganador? ¿Y por el perdedor?
Por parte del ganador significaría una subida de moral, ya que sin apenas esfuerzo a conseguido lo que quería, pero, ¿y el perdedor? el perdedor no tendría autoestima, desearía volver atrás y cambiar todo el tiempo dedicado a trabajar esta acción por aquel tiempo libre que nunca pudo aprobechar, lo que se suele llamar tiempo perdido.
En conclusión, si estubiera en nuestras manos todos seríamos ganadores, pero sería imposible, ya que siempre debe aver algún perdedor, por lo que estaría mucho mejor ser neutrales, trabajar y tener las mismas capacidades. Pero como siempre las respuestas a estas preguntas no son respuestas, siempre se dejan en el aire, porque... SOMOS PERSONAS!

¿Por qué tener un estado de ánimo?

En teoría, un estado de ánimo es similar a un estado emocional pero dura un periodo más largo. Se diferencian de las emociones en que son menos específicos, menos intensos, más duraderos y menos dados a ser activados por un determinado estímulo o evento. Normalmente suelen ser buen o mal estado de ánimo, en cambio en los emocionales hablamos de estados que duran un periodo corto de tiempo, como el miedo, la sorpresa,... En estos estados intervienen mucho el temperamento y la personalidad, los cuales se generan a lo largo de nuestra vida y no varían en toda ella. 

Según algunos psicólogos los estados de ánimo dependen también de la energía (cansados o activos), la tensión (nerviosismo), la alimentación y el ejercicio físico de estado de ánimo.

Ahora bien, yo tengo una pregunta: ¿Por qué nuestros hechos marcan el estado de ánimo al que debemos seguir? y en concreto, ¿Por qué tener estos estados de ánimo?

Desde otra perspectiva, ¿a alguien le gusta estar enfadado? ¿y triste?

y sin embargo, ¿a todos nos gusta estar alegres, contentos, felices... ?

Desde mi punto de vista algunos psicólogos tienen mucha razón, porque todo está a la vista, alguien estresado o con demasiada actividad en su vida, muy pocas veces llegará a alcanzar esa comodidad completa de felicidad. Sin embargo, alguien tranquilo, que le dedica tiempo a lo que le gusta y que pasa tiempo con los suyos alcazará bastantas veces esta felicidad de la que hablamos.

No nos damos cuenta, pero nuestros actos marcan este estado de ánimo, y actúa sólo, sin avisar, aunque hace unas horas hayamos estado en nuestra plena comodidad o felicidad. ¿Cómo podemos cambiar este estado? ¿Y si no nos gusta? 

En mi opinión y ya para finalizar esta primera entrada, creo que tenemos dos opciones, o hacer siempre lo correcto, lo cual es imposible para el ser humano; o hacer lo que nosotros creamos correcto, así nuestro estado de ánimo, será para NOSOTROS el mejor, sin contar con la opinión de los demás, simplemente lo que nosotros y solo nosotros pensamos.